domingo, 24 de agosto de 2008

Uno para todas (The sisterhood of the traveling pants)

Tengo un problema de base con esta película: no soporto las fiestas de pijamas. Para justificarme he de explicar que mi infancia fue bastante sosa en cuanto a amistades femeninas se refiere, puesto que mis padres no me dejaban dormir en casa de otras niñas, ni mis amigas venían a pasar la noche a mi casa. Tampoco iba a campamentos y la movilidad geográfica obligada por el trabajo de mi padre ayudó poco a crear lazos sólidos de cariño infantil. Debido a esto puede que mi concepto de la amistad sea muy diferente a lo que se puede ver en este tipo de películas.

Dicho esto,
“Uno para todas”, en original “The sisterhood of the traveling pants” (2005, la primera parte, puesto que ya se ha estrenado una segunda) me parece un poco ñoña y típica, a pesar de que su intención parece ser la de mostrar precisamente lo contrario. El caso es que nunca he compartido ropa con mis amigas (ni me gusta hacerlo, soy muy posesiva :P) así que no entiendo la extraña unión que se puede dar en el usufructo de un pantalón vaquero supuestamente mágico (algo que, dicho sea de paso, no tiene explicación alguna ni demostración concreta en la película). Eliminado pues todo el romanticismo del visionado (jijiji) vayamos a los aspectos estrictamente argumentales.

*** Spoilers! ***

Tibby, Lena, Carmen y Bridget son cuatro amigas interpretadas por Amber Tamblyn, Alexis Bledel, America Ferrera y Blake Lively respectivamente, que se conocen desde que nacieron. Son las cuatro mejores amigas, se complementan, se ayudan y se adoran, hasta que a los 16 años deben pasar su primer verano separadas. Un pantalón vaquero que el destino pone en su camino será el nexo que unirá sus aventuras veraniegas tan similares a las de cualquier otro drama al uso. Una se va a conocer a sus abuelos en Grecia; otra viaja a ver a su padre, separado de su madre y que ha decidido rehacer su vida con otra mujer; una tercera, huérfana de madre, acude a un campamento de fútbol con intención de encontrar lo que no tiene en casa (aunque lo que hace realmente es tirarse al primero que pilla); y la última se queda trabajando en el tradicional
Walmart que nombran en multitud de películas y aprovecha para rodar un documental con el que pretende mostrar que la vida es una mierda, idea que desterrará de su cabeza al conocer a una pequeña vecina enferma de leucemia.

El planteamiento no va más allá de mostrar el cambio que sufren las chicas en su forma de ver la vida, supuestamente motivado por el especial vaquero que a todas les queda bien. La película hace llorar de principio a fin, aunque no emociona tanto por cómo está rodada ni por su inteligencia, sino por los componentes tópicamente emocionales (enfermedades, desatención paternal, muerte de seres queridos…). Es lágrima facilona, puesto que desde el inicio intuyes qué va a ocurrir y de qué manera: cuatro adolescentes encontrándose a sí mismas y haciendo las paces con un mundo que las tiene encasilladas, ni más ni menos.

“Uno para todas” recuerda inevitablemente a otras películas del género como
“Amigas para siempre” (1995), en la que ya se hacía un homenaje a la amistad adolescente frente a la adversidad adulta. Además, todas estas producciones tienen como denominador común una oda a la familia americana que a mí me resulta demasiado dulzona, por mucho que pretendan endurecerlo con muertes, divorcios y desamores. Y como no, todo acaba bien, algo que francamente me cuesta asumir en cualquier producto cinematográfico que pretenda abordar algo tan complejo como la difícil transición de la adolescencia.

Una pequeñita decepción pues con esta película de la que esperaba algo un poco más trabajado que un drama lacrimógeno común con Alexis Bledel haciendo de
Rory Gilmore. La segunda parte cuenta con las mismas cuatro actrices, aunque parece que la saga sigue gustando más en Estados Unidos que en España, vistas las puntuaciones de los usuarios. Deduzco que la receta se puede exprimir hasta la saciedad con nuevas aventuras con los milagrosos tejanos de por medio.

*** Fin de spoilers! ***

Las películas se basan en los libros de
Ann Brashares, una escritora estadounidense que ha tenido un gran éxito con esta serie literaria, que ya va por su quinta entrega. El director de “Uno para todas”, Ken Kwapis tiene una amplia experiencia como realizador de televisión, en series como “Urgencias”, “Malcolm in the middle” o la versión americana de “The Office”, pero para la gran pantalla no ha dirigido nada que me llame especialmente la atención. En general la película se deja ver y cumple su cometido de entretener pero no aporta absolutamente nada digno de interés. Un aprobadillo sin méritos.

6 comentarios:

  1. Hola

    Esta película la medio vi en un viaje en el Talgo 200 (antes de que lo sustituyeran por el Avant) entre Málaga y Córdoba. Y digo que la medio vi porque prefería contemplar el paisaje y ni siquiera me puse los cascos más que a ratos.

    Me alegro de no haberle prestado atención, porque ese tipo de películas no me gustan nada de nada, por motivos muy parecidos a los tuyos. Buena crítica :-).

    Aparte, no me suelen gustar las películas "de chicas", en el sentido de películas cuyas únicas protagonistas son mujeres y tratan temas que la "corrección política" considera sólo de mujeres (sentimentalismos, llantos, la sensibilidad femenina superior, como si los hombres fueramos robots o algo parecido, o como si a las mujeres no les pudieran gustar las películas de Jackie Chan...). Eso sí, no me parece mal que se hagan, sólo que yo no las veo. Nunca le haría a esta película la crítica que le hicieron a Master and Commander (que me encanta O:-D) de ser una película demasiado masculina (no hay ni una actriz). Parece que se pueden hacer películas "de chicas", pero no "de chicos".

    Contradicciones de nuestro tiempo.

    Un saludo.

    Juan.

    ResponderEliminar
  2. Juan, yo es que de pequeña tenía muchos amigos y pocas amigas y, sobre todo, me gustaba más estar con niños que con niñas, así que nunca he tenido las típicas aficiones (cursis) tradicionalmente de chicas. De mayor tampoco me ha gustado nunca el plan de salir de marcha "sólo chicas", por lo que en la universidad tenía no pocos enfrentamientos con mis compañeras.

    En lo referente estrictamente a la película, sigue un cliché tan parecido a "El club de los cinco" que a veces parece que tras esa no han vuelto a hacer ninguna película original sobre amigos adolescentes. La artista tímida, la deportista liberal, la gordita traumatizada, la rebelde en contra del mundo... Son personalidades tan previsibles y arquetípicas que no hace falta ni ver la película para saber lo que van a hacer a lo largo del metraje XD

    Pero estoy de acuerdo contigo: deben existir pelis como esta, igual que deben existir las de Jackie Chan (por Dios, aún no he comentado una de ese gran hombre?? con lo que me reí con "Operación Cóndor" :D). Cada tipo de cine tiene su público, está claro.

    saluditos!

    PD: No he visto "Master and Commander", pero me da miedito eh :P

    ResponderEliminar
  3. Yo reconozco que la he visto (también por Alexis Bledel) y me pareció digerible pero no demasiado buena. No esperaba ni más ni menos, es que no estaba en plan de evaluarla :D Simplemente la vi y punto...

    Un abrazo!

    ResponderEliminar
  4. Rubenvike, no mientas... te gustó!! Y como salía Rory Gilmore más! XDDDD Pues es que mala no es... tampoco buena. Se deja ver pero no tiene nada especial, como dije. No es de las que retienes en la memoria (a lo mejor a Alexis Bledel sí, no sé... :P)

    saluditos!

    ResponderEliminar
  5. Pues por el titulo no me suena, pero eso del pantalon que se pasan entre las amigas si, de haber visto algun trocillo en la tele...

    Pero vamos, que no, que yo tampoco soy de ir prestando la ropa.

    ResponderEliminar
  6. Jose, es que las películas de chicas tienen eso, que si no se comparte la ropa ya no tienen gracia... :P

    saluditos!

    ResponderEliminar

Gracias por participar en Lillusion!